
Como tantos residentes del condado de Summit, Mike y Emily Sarges se mudaron a Breckenridge creyendo que era solo una experiencia temporal. Veinte años, algunos cambios de carrera y dos hijos después, no se imaginan viviendo en otro lugar. "La comunidad es lo mejor", dice Mike. "Estamos muy unidos, todos tenemos algo en común. Nos sentimos parte del tejido social de Breckenridge".
Ese sentido de comunidad los ha llevado a contribuir de maneras significativas, desde entrenar a los equipos de béisbol de sus hijos hasta ser guardianes de nuestro entorno montañoso. Se conectaron por primera vez con HC3 a través de programa de compostaje"Hace mucho que no tenemos basura apestosa", dice Emily riendo. Luego se enteraron de HC3. Programa Cumbre de Solarización“La energía solar siempre fue un objetivo para nosotros”, explica Mike. “Tenemos tanto sol que tiene sentido aprovechar esa energía gratuita”.

A través del programa Solarize también consiguieron una auditoría energética del hogarHablan maravillas de su auditor, quien les ayudó a identificar oportunidades para mejorar la eficiencia energética, como aislar las tuberías de su sótano. Los programas de HC3 han ayudado tanto a Mike y Emily que han logrado convencer a varios vecinos para que también participen. Ahora, se proponen deshacerse de todos los electrodomésticos de gas natural de su casa, de nuevo con el apoyo de HC3.
Para ellos, HC3 es tan importante para la comunidad como para la gente. "Los programas son muy reconocibles y es fácil participar en ellos", explica Emily. "Queremos preservar lo que tenemos para las generaciones futuras", añade Mike. "Queremos que nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos también puedan disfrutar de este lugar".
Cuando apoya a HC3, ayuda a proteger nuestra comunidad montañosa para las generaciones futuras.